Sexo virtual, un futuro incierto
En 1993, Sylvester Stallone era ya toda una estrella de Hollywood por méritos propios. Tras triunfar con sagas como Rocky o Rambo, el intérprete italoamericano probó suerte también con el drama o la comedia. Sin embargo, Stallone era un tipo de acción, y como mítico héroe de la pantalla nunca dejó de lado ese rol, en películas como Demolition Man, que es la que estrenó aquel año. Fue un éxito relativo en taquilla y quedó marcada como uno de los grandes clásicos de los 90 para sus fanáticos. En ella, Stallone interpretaba a John Spartan, un policía que termina causando un gran número de bajas en su intento por detener al peligroso criminal Simon Phoenix. Lo logra, pero a un precio demasiado alto, por lo que ambos son condenados a criogenización. Treinta años después, la sociedad ha cambiado mucho, y cuando Phoenix escapa y siembra el caos de nuevo, la sociedad decide traer a Spartan también de vuelta, para que utilice sus dudosos métodos contra el asesino.